Arturo Guerrero, vocero y jefe de prensa de Antonio Echevarría García, despojado de su vehículo por sicarios
LA MADRUGADA DEL TERROR EN TEPIC Y XALISCO
Por José Agapito Robles/Censura!
Los muertos de cada día no fueron la excepción ayer, ni tampoco en la madrugada de hoy. Aunque, un tiroteo entre efectivos de la Armada de México en una colonia de Tepic, la famosa Acayapan, que duró más de una hora, dejando presumiblemente un saldo de más de 10 muertos, provocó que las redes sociales se activaran desde la madrugada y pasaran en vela.
Sin embargo, la activación inmediata y reacción de las Bases de Operación Mixta (BOM) no fue normal. Tuvo un detonante especial. Y es que, en la cabecera municipal de Xalisco, una patrulla de Tránsito Municipal al mando del “flaco de oro”, ex Policía Judicial Federal y actualmente habilitado como Director de la Policía Municipal de Xalisco, le marcaron el alto a un góndola color blanco que por un momento se pensó llevaban cortadores de caña con destino a Testerazo. Y cuando los tránsitos comenzaron a pedir los documentos y licencia de manejo, casi caen infartados luego de que del vehículo de volteo saltaron más de 20 sujetos fuertemente armados que los hicieron poner de rodillas y luego besar el suelo. Uno de los uniformados se le aflojaron los esfínteres. Ya ahí, el grupo armado utilizando la patrulla instalaron un “retén” e interceptaron varios vehículos, entre ellos una flamante y lujosa camioneta GMC tipo ACADIA, conducida en esos momentos nada menos que por el vocero y jefe de prensa del Gobierno de Nayarit, Arturo Guerrero, quien en un principio pensó que se trataba de personal de la Secretaría de Seguridad Pública al mando de Javier Herrera Valles. No era así. Lo bajaron de cantarito y se presume que también fue sometido junto con los tránsitos. Todo fue rápido.
Posteriormente se activó la alerta. Antonio Echevarría García había sido despertado y avisado de lo ocurrido con su jefe de prensa y vocero, Arturo Guerrero. El miedo cundió.
Las fuerzas castrenses aglutinadas en el BOM se alertaron y salieron solamente efectivos de la Armada de México. No se permitió la participación de municipales y estatales.
De ahí, de Xalisco, se vendría lo ocurrido en Acayapan, donde sicarios se enfrentarían a elementos de la Armada de México y donde todavía se desconocen los cifras exactas de los muertos