Un terremoto de magnitud 7,2 en la escala de righter sacudió las Filipinas, disparando la alerta de tsunami.
El movimiento telúrico tuvo lugar a 34 kilómetros de la ciudad filipina de Pangyan. y tuvo una profundidad de 10 kilómetros, muy somera por lo que su magnitud y epicentro es en el mar, obliga a las autoridades a enviar la alerta.
El Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico envió un boletín minutos después del terremoto, advirtiendo que Filipinas e Indonesia, así como cualquier otro lugar a 300 kilómetros del epicentro del sismo, podrían verse afectadas por un eventual tsunami.