BRÚJULA CORA

1997

Por Emo

*AQUÍ, AQUÍ NO PARECE NAYARIT. NI POLICÍAS NI PROPAGANDA POLÍTICA

*HACE TRES AÑOS, EL MALINAL VIVIÓ EL TERROR: TRES MUERTOS Y 15 HERIDOS DE BALA

Llegar al pueblo de El Malinal en el municipio de Xalisco, no es tan sencillo como parece, su camino de terracería y algunos tramos de empedrado, lo hacen complicado. De la cabecera municipal a éste pueblo situado en la sierra del cerro San Juan, son más de veintitantos kilómetros. Sus paisajes son especiales: pinos, robles y plantaciones de aguacate y café, refrescan el área. Todo parecería normal, un paseo de ensueño.

Sin embargo, el manto negro del horror todavía cubre a los habitantes de El Malinal, pueblo cafetero. Aquí, hace exactamente tres años y un mes, ya en la gris administración del Cuatrienio, se registró la peor pesadilla jamás padecida por sus habitantes, pues cuando celebraban una fiesta en la plazuelita que está frente a las instalaciones del Comisariado Ejidal, amenizada por una banda de Compostela “Los Ráfagos”, los demonios se soltaron y  con ráfagas de plomo comenzaron a tirotear a la gente ahí reunida, dejando un lamentable saldo de tres personas muertas, entre ellas una menor de edad y un anciano, así como 15 lesionados. De los atacantes no se supo nada. Los cuerpos policiacos llegaron a El Malinal esa noche de terror y trasladaron a los lesionados de bala a Tepic. No se podía creer semejante barbarie.

Por eso hoy, Sábado 17 de Abril del 2021, antes de llegar a la bifurcación que lleva a El Malinal y hacia San Antonio y Tepozal, dos vehículos con gente fuertemente armada y con un olor a mariguana, salían del pueblo. Una escena que se ve cotidianamente en estados como Michoacán, Guerrero, Estado de México, pero que en Nayarit parecía imposible imaginarlo.

El paseo de ensueño en la llamada Ruta del Café, deja de serlo. La distracción del paisaje pasó de inmediato a la preocupación. Cuerpos policiacos y castrenses, ausentes en todo el camino. Aquí no entra ningún tipo de corporación policiaca, ni municipal, estatal o la llamada Guardia Nacional. Ésta tierra ubicada a no más de 40 kilómetros de Tepic vive la peor de sus pesadillas con grupos armados que, si bien no molestan al paseante, no dejan de ser un foco preocupante.

Ahí en el pueblo, un homónimo de un exgobernante nayarita, don Celso Delgado, hombre alto, afable pero a la vez cortante, cuando se le pregunta qué hay para ver en el pueblo, responde:

-¡Nada! No hay nada que ver amigo

Se entiende. No es que no sea amable, se entiende su dolor, su desconfianza.

Más adelante encontramos a don Adán García, productor de café, quien tiene su propia marca: “Los Venadillos”. Amabilidad total. La charla gira en torno a lo que hace con su café. Nos muestra una despulpadora y nos lleva a la azotea de su casa donde está secando café. No hay más tema. Se entiende.

***

Salir de El Malinal y tomar hacia San Antonio y no salirse del camino. No ir a Tepozal, hacerlo implicaría no llegar al pueblo de Ixtapa de la Concepción. El cambio brusco de flora es radical. Los pinos, robles y aguacates se esfuman a la vista. Acá se ve semiárido, huizaches, plantaciones de guanábanos, además de huertas de mango donde sus hojas resienten la fuerte sequía  que azota este mes de Abril; hay cercos con ganado. Los pobladores observan con discreción, algunos saludan, otros optan por voltear la mirada como haciendo algo.

Aquí, de la cabecera municipal de Xalisco al pueblo de Ixtapa de la Concepción, ausente está la propaganda política. Aquí pareciera ser la tierra de nadie. Aquí algo ocurre. Aquí no parece Nayarit.