BRÚJULA CORA
Por el Sr EMO
Hay que enseñarse, elemental, que el dueño en el buen sentido de la palabra, tanto de la cancha, del equipo, así como del balón en Nayarit, es Miguel Ángel Navarro Quintero. Él es el gobernador de todos los nayaritas, les guste o no a algunos políticos aldeanos que les falta estatura para llegarle siquiera a las corvas.
Hoy con el pronunciamiento del gobernante Navarro Quintero sobre el controvertido proyecto de la construcción del Estacionamiento Subterráneo frente a la Catedral, en el sentido claro de que no está de acuerdo, son ya, con él, dos poderes que manifiestan su desacuerdo. El primero fue la presidente del Congreso del Estado, quien también levantó la voz en la tribuna para hacérselo saber a la señora María Geraldine Ponce que no tenía las cartas a su favor. Hizo caso omiso y siguió como el papalote, volando sin sentido. Pero hoy, Miguel Ángel fue claro y contundente. Se acabó. Hay otras prioridades. Y dentro de lo mismo, el Gobernador tocó el tema de SIAPA, donde familias sí pagan y no les llega el servicio. Y no solamente eso, «¿qué creen?», diría la señora Geraldine: les cortan el drenaje para que pasen a pagar el adeudo. La señora que malgobierna Tepic, pues, quien desde un inicio dio muestras de su desprecio por los ancianos a quienes formó en la plaza principal de Tepic para que pagaran su predial y agua sin descuento alguno. ¿Pretextos?: «No está actualizado el INE». «No están al corriente». No y no y no y no. De ahí no se le sacó. Por ello, a un año de distancia, el gobernador se desmarca y pinta su raya. La señora no lo entiende en su frivolidad y por eso hoy Miguel Ángel Navarro Quintero no se anduvo por las ramas, se fue directo. Y a más de un año de distancia ya se definen las cosas como son. La política de la señora Geraldine es contraria a la política humanista y sensible del mandatario Miguel Ángel Navarro Quintero y del mismo presidente Andrés Manuel López obrador… Lo que se avecina, es de pronóstico reservado. Tiempo al tiempo… Y justo a un mes de cumplir un año en el cargo de la Secretaría de Desarrollo Rural, José Antonio Arreola García, quien relevó al gris Ángel Ávalos, se fue sin pena ni gloria y la silla fue ocupada por el talentoso Javier Mercado, quien antes de llegar aquí se encontraba como Secretario del Ejecutivo. En fin, es una cartera estratégica. Ahí se requiere un hombre decidido, comprometido e íntegro. Ya se verá si la brújula agarra el rumbo adecuado.